Su objetivo va mucho más lejos que hacer que las paredes que nos rodean queden elegantes y bonitas. Comprenden el espacio como un elemento esencial de la vida de las personas. Un elemento que incide en el estado de ánimo y por tanto, en la manera de vivir. Porque el espacio es como el organismo de una persona, se conforma de miles de millones de elementos definidos por materia, textura, olor, color, luz, volumen…y la forma en la que los vivimos es más inconsciente que consciente. De igual modo que nuestro cuerpo no muestra los secretos de nuestra personalidad, los espacios esconden mensajes en cada uno de los pequeños detalles que los conforman.
Y en eso; en saber ver cada pequeño gesto de una entrada de luz, el valor de pasillo aparentemente modesto, las posibilidades de los pocos metros cuadrados de una habitación…En eso Nekane, Imanol y Estibaliz, se hacen grandes. Es un modo de ser, una forma de estar en el mundo y un gesto único a la hora de entornar los ojos para verlo.
No hay nada en el mundo que vaya a mantenerse igual para siempre. Ellos tampoco. Lo que han vivido, lo «anterior» es lo que les ha hecho, de manera natural, llegar hasta aquí, hasta dotto. El antes estuvo lleno de aventura, emoción y aprendizaje y el ahora sigue repleto de los mismo ingredientes con el valor del camino recorrido.
Nekane, Imanol y Estibaliz comparten una pasión: el interiorismo. Y también comparten una obsesión: el compromiso con las personas para las que van a crear un espacio, un cobijo, un lugar de felicidad.
En dotto. desarrollan proyectos de interiorismo y reformas de: viviendas, hoteles, espacios de trabajo. Formación y experiencia es un importante aval pero el compromiso con las personas y la pasión por el interiorismo es el seguro que ofrecen en cualquier proyecto.
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NEKANE ARAMBURU
ESTIBALIZ ZUBIAURRE
IMANOL ARAMBURU
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