CUESTIONES RELATIVAS A LA COMUNICACIÓN SENSORIAL
El marketing sensorial en el espacio consiste en incorporar elementos que permitan estimular sensorialmente a los usuarios con el fin de generar experiencias y recuerdos memorables. Los sentidos son la base para la creación de experiencias y tienen el potencial de ser un valor diferenciador para una marca o una empresa. El primer contacto del ser humano con el entorno es a través de los sentidos, los receptores sensoriales son células que trasmiten información al cerebro que posteriormente es procesada y almacenada en la memoria del individuo. El significado semántico de la información es determinado según variables personales condicionadas por las creencias, estilos de vida y experiencias. Es por lo anterior, que la estimulación sensorial en el espacio interior debe estar direccionada en un mismo sentido donde se presente coherencia con los valores de la marca.
- LA VISTA. Los elementos que influyen en la percepción visual, como la luz, el color y el diseño en general, adquieren una importancia fundamental para conseguir la diferenciación de una marca.
- EL OÍDO. Es importante controlar cada una de las cualidades del sonido (altura, intensidad o volumen, duración y timbre) para generar armonía en el ambiente.
- EL OLFATO. Es el sentido que más se recuerda y se asocia a una marca, en la actualidad está siendo cada vez más utilizado en cadenas de ropas de marca, por ejemplo. Una panadería puede utilizar el olor de un pan recién horneado como estrategia de marketing olfativo, el aroma en el exterior genera deseo de comprar pan.
- EL GUSTO. La integración del gusto produce experiencias multisensoriales capaces de generar emociones complejas que de vienen condicionadas según las culturas y los respectivos sabores que están presentes en la mismas.
- EL TACTO. Es un sentido que también se puede relacionar con otros sentidos para generar experiencias multisensoriales, por ejemplo, a través de la estimulación visual se puede impulsar a una persona a tocar una superficie o un objeto expuesto, si este le resulta llamativo.
BAR TXALTXA EN ZARAUTZ.
Un ejemplo de un proyecto en el que, sin poder hacer cambios radicales, se necesitaba impregnar el espacio de los valores del nuevo propietario.El reto se centra en conseguir transmitir ese espíritu haciendo una mínima intervención. El reto de REINVENTAR un espacio con mínimas intervenciones nos obliga a poner en marcha nuestro ingenio e imaginación.
El Bar Txaltxa se distribuye en 2 zonas principales con una zona de paso que hemos aprovechado para poder crear zonas íntimas de estar con barras y bancos altos. Para acentuar dicha intimidad, se han colocado apliques de diseño sobre cada mesa y guirnaldas de luz decorativas «enredadas» entre las vigas del techo.